El vehículo estaba cargado con zapallos y, al momento de ser interceptado, estaba realizando venta ambulante sin la habilitación de transporte correspondiente, libreta sanitaria y sin haber gestionado en la oficina correspondiente el permiso para realizar venta ambulante de mercadería.
En consecuencia, se labró un acta donde se infraccionó al titular del vehículo por introducción clandestina, falta de habilitación de transporte y por carecer de la libreta sanitaria.
Asimismo, se decomisó la mercadería y se determinó su secuestro en espera de la resolución del Juez de Faltas, para ser destruida teniendo en cuenta que se encontraba mezclada con gasoil y algunas bolsas estaban contaminadas con esta sustancia por lo que no sería apto para el consumo humano.
